1/2/07

Faemino y Cansado en el restaurante


(transcripción):
En un restaurante. Entra Cansado (cliente) y le recibe Faemino (camarero);

C: Hola, buenas, venía a comer.
F: Sí, por favor, siéntese en esta mesa.
C: Perdón, ¿podría sentarme en aquella otra?
F: No, tiene que ser en ésta.
C: Es que me gusta más aquella.
F: Pues no, ésta. (C se sienta)¿Qué desea?
C: Hombre, me gustaría comer.
F: ¿No quería sentarse en aquella mesa?
C: Ah, sí... ¿puedo? (hace ademán de levantarse)
F: No, tiene que ser ésta.
C: Bueno. ¿Me da la carta, por favor?
F: (parado junto a la mesa con gesto aburrido) No puedo, estoy ocupado.
C: (después de unos segundos)¿Por favor, me podría dar la carta?
F: Es que estoy ocupado, estoy a mis cosas...
C: Por favor, ¿puede dejar de hacer lo que está haciendo un momento y darme la carta?
F: (contrariado) Aquí tiene.
C: Oiga..., no entiendo nada.
F: ¿Qué? ¿Qué pasa?
C: ¿Esto en qué esta? ¿Esto es chino?
F: Sí. ¿No sabe usted chino?
C: No.
F: ¡¿No sabe chino?!
C: No, no sé chino. ¿Me da otra carta?
F: Sí, claro. (la recoge y le vuelve a dar la misma) Aquí tiene.
C: Oiga... esta es la misma carta.
F: No, no es la misma. Esto es japonés. ¿No sabe japonés?
C: No, no sé japonés, ¿me da otra carta?
F: Sí, por supuesto. (más de lo mismo)
C: (desesperándose) Caballero, está es la misma carta...
F: No, eso es coreano.
C: No sé coreano. ¿Me puede ayudar?
F: Bueeeeno...
C: ¿Aquí qué pone?
F: ¿Ahí? Acelgas rehogadas.
C: ¿Y aquí?
F: Acelgas rehogadas.
C: ¿Y esto?
F: Acelgas rehogadas.
C: (señalando al azar en la carta e inquiriendo con la mirada)
F: Acelgas rehogadas.
C: Muy bien. ¿Y esto de aquí?
F: Ahí pone añeoañas estofadas.
C: ¿El qué?
F: Añeoañas estofadas.
C: ¿Añeoañas?
F: Sí, es una cosa que no se puede decir. Las añeoañas no se puede decir aquí, somos así de raros.
C: ¿Y qué son las añeoañas?
F: Pues son unas cositas redonditas, marrones, con piedras...
C: ¿Que si quieres las comes y si no las dejas?
F: Sí.
C: (emocionado) ¡Lentejas!
F: (sacudiéndole un guantazo a C) Eso aquí no se puede decir. Bueno, ¿qué va a tomar?
C: Sí, veamos... Pues de primero me va a poner unas acelgas rehogadas... De segundo... acelgas rehogadas...
F: ¿Y de postre?
C: Mmmm, no, postre casi que no voy a tomar.
F: Muy bien. Espere un momento, por favor. (se va a la cocina y tras unos segundos vuelve) Sí, sí nos quedan acelgas rehogadas. ¿Se las pongo?
C: Sí, sí...F: (vuelve de la cocina con una nota de papel en un platito) Aquí tiene.
C: (incrédulo) Oiga... ¿esto es la cuenta?
F: Sí.
C: Pero... sí no me he comido ni el primer plato... ¿14.000? ¿Cómo sube tanto esto?
F: Por los postres.
C: Pero si yo no he tomado postre.
F: Ya. Pero tampoco ha tomado primer plato. Ni segundo plato.
C: Pero, bueno, oiga... ¿14.000?
F: ¡15.000!
C: ¿Eh?F: Ha subido... la inflación. ¡16.000!
C: Oiga...
F: ¡17.000! ¡24.000!
C: Vale, vale, le pago.
F: ¡35.000!
C: ¡No, no, le pago, le pago! ¿Aceptan tarjeta de crédito?
F: Por supuesto.
C: ¿Y servilleta de crédito?
F: Claro.
C: Aquí tiene. (le da una servilleta)
F: (examinando la servilleta con seriedad) Firme aquí, por favor. (C firma la servilleta) Un momentito. (F se va hacia la cocina y a los pocos segundos reaparece) Caballero, ¡esta servilleta no tiene fondos! (se la lanza a la cara).
C: Vaya... Bueno, no se preocupe, le pago. (saca una bolsa de lentejas y le echa un puñado a F en las manos)
F: (contando las lentejas) Che, che, che, ¡un momentito, aquí faltan dos!
C: ¿Dos qué?
F: ¡Lentejas! (C saca un revólver y dispara a F, sale del restaurante, F se queda impávido agarrándose la tripa) Ay... pues no me ha matao el tío mierda este... Pero no me voy a morir aquí. Me voy a morir... ¡allí! (se marcha)

No hay comentarios:

 
Google